Sinopsis:
Elegida por los argentinos como la mejor selección nacional de todos los deportes y los tiempos, la Generación Dorada ha trascendido la historia del básquet local para convertirse en un hito internacional, no solo por su profesionalismo y su estilo de juego, sino también por su entrega en cada partido, su compañerismo y su fenomenal espíritu de equipo.
Dorados y eternos reconstruye el camino de este seleccionado único que despertó admiración unánime al ser el primero en derrotar al invencible Dream Team estadounidense -equipo conformado íntegramente por jugadores de la NBA- en el Mundial de Indianápolis 2002. Dos años después, el conjunto liderado por Manu Ginóbili sería leyenda al conquistar la Medalla Dorada en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Libro indispensable para los amantes del básquet y del deporte, recupera el recuerdo de sus protagonistas -todos jugadores de renombre internacional-, las anécdotas de vestuario y las jugadas que cambiaron la historia.
«Cuando Argentina jugaba, todo su país jugaba. Eso es lo que teníamos que vencer. No su ataque ni su defensa. Su espíritu. En ese momento entendí quién era verdaderamente nuestro oponente y, debo admitir, me intimidaba.» Mike Krzyzewski, entrenador de la Selección de Básquet de los Estados Unidos.
«Me gusta el corazón de este equipo, es incomparable. El deseo de ganar, la pasión. He visto mucho básquetbol extranjero, pero no hay ningún equipo que mantenga ese corazón y esa pasión como la Argentina.» Gregg Popovich, entrenador de San Antonio Spurs.
«El corazón de este equipo es impresionante y nos representa perfecto donde salga a jugar. Emocionan cuando salen a la cancha.» Diego Maradona.
«Me emociona porque no es solo lo que se ganó, sino cómo se ganó: con juego en equipo, con unión. Estos muchachos dieron una lección de básquet, una lección de vida, de cómo disfrutar en grupo. Fue magnífico, es increíble lo que lograron.» Sergio "Cachito" Vigil, ex entrenador de Las Leonas.
«Les ganamos a Batman, a Superman y a todos los superhéroes.» Carlos Delfino.
«Nadie creía en nosotros, salvo nosotros.» Luis Scola.
Dorados y eternos reconstruye el camino de este seleccionado único que despertó admiración unánime al ser el primero en derrotar al invencible Dream Team estadounidense -equipo conformado íntegramente por jugadores de la NBA- en el Mundial de Indianápolis 2002. Dos años después, el conjunto liderado por Manu Ginóbili sería leyenda al conquistar la Medalla Dorada en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Libro indispensable para los amantes del básquet y del deporte, recupera el recuerdo de sus protagonistas -todos jugadores de renombre internacional-, las anécdotas de vestuario y las jugadas que cambiaron la historia.
«Cuando Argentina jugaba, todo su país jugaba. Eso es lo que teníamos que vencer. No su ataque ni su defensa. Su espíritu. En ese momento entendí quién era verdaderamente nuestro oponente y, debo admitir, me intimidaba.» Mike Krzyzewski, entrenador de la Selección de Básquet de los Estados Unidos.
«Me gusta el corazón de este equipo, es incomparable. El deseo de ganar, la pasión. He visto mucho básquetbol extranjero, pero no hay ningún equipo que mantenga ese corazón y esa pasión como la Argentina.» Gregg Popovich, entrenador de San Antonio Spurs.
«El corazón de este equipo es impresionante y nos representa perfecto donde salga a jugar. Emocionan cuando salen a la cancha.» Diego Maradona.
«Me emociona porque no es solo lo que se ganó, sino cómo se ganó: con juego en equipo, con unión. Estos muchachos dieron una lección de básquet, una lección de vida, de cómo disfrutar en grupo. Fue magnífico, es increíble lo que lograron.» Sergio "Cachito" Vigil, ex entrenador de Las Leonas.
«Les ganamos a Batman, a Superman y a todos los superhéroes.» Carlos Delfino.
«Nadie creía en nosotros, salvo nosotros.» Luis Scola.
No hay comentarios:
Publicar un comentario